Manel Piñero

Háblanos un poco sobre la webserie Em dic Manel!
Es una serie de humor, y si te gusta el tema del humor te reirás, puedes encontrar situaciones muy surrealistas, y también para la gente que le gusta el APM?, que lo suele ver y le gusta la sección del Homo, también es una oportunidad para ver a una persona como yo, que estás acostumbrado a verle en un determinado papel, me vean haciendo una cosa diferente. El hecho de que sea una serie de humor y que el guion sea bueno también es un atractivo de por sí.

Para ti que la gente te asocie tanto con el Homo, ¿es más una ventaja o un inconveniente? 
Cuando haces un personaje que tiene el peso del Homo, que ha sido marcado dentro de un programa tan importante como es el APM? hace que la gente te asocie mucho a este personaje, y justo este es el punto de partida de la serie, como lucho contra el encasillamiento, que la gente sólo me vea como Homo, y es una cosa que puede pasar en la vida real, y nosotros lo hemos usado a favor de la serie, es como una autoparodia.

¿Pero te pasa en la vida real?
Sí, tiene las dos cosas, están las ventajas de que cuando te dedicas al mundo de la tele, del cine o de la interpretación, quieres que se te conozca para acceder a otros lugares de trabajo y en castings, y tiene la ventaja que cuando te presentas tienes en tu favor que la gente sabe quién eres; inconvenientes, pues que justamente por eso no encajo en papeles y castings, porque mientras el Homo APM siga en antena es muy difícil, al menos en Cataluña, que yo pueda hacer un papel diferente en televisión o en cine. Pero como todo se acaba en esta vida, cuando se acabe el Homo espero tener la parte ganada de que conozcan Manel, y me puedan ver de otra manera.

Hablamos de APM, después de tantos años, ¿cómo podéis continuar haciendo gags y que la gente no se dé cuenta?
Nos pasa, es un hándicap que tenemos, y de hecho es una cosa que nos ha pasado siempre, menos en la primera temporada cuando era la novedad y no era tan conocido el personaje, pero después a medida que el personaje se ha ido haciendo más popular, cuesta más. Evidentemente la gente que me reconoce no la ponemos, porque se pierde el factor sorpresa que se busca cuando haces el Homo y entonces siempre intentamos ir a lugares donde haya gente que, por el sector de edad o por su procedencia no vea Tv3 y podamos hablar sin ser reconocidos. O sino un lugar que sea por ejemplo muy grande, con mucha afluencia de gente, que si me reconocen no pasa nada, porque constantemente entra gente nueva,siempre habrá alguien que no me conozca. Además también hay muchas personas que no ven Tv3, que a veces pensamos que nos ve todo el mundo y que somos hiperconocidos, y evidentemente el APM? es un programa histórico, pero hay gente que no ve la televisión.

Uno de los éxitos del Homo es que la gente haya cogido las frases y las haya introducido en su vocabulario, en su día a día?
Creo que ese es más el éxito del programa, generar unas frases que son muy conocidas y que son aplicables a muchos ámbitos de la vida y, que además son muy graciosas, pero en cambio la sección del Homo, creo que el éxito es a la inversa, que la gente no conozca y que haya este contraste entre vocabulario normal que utiliza la gente con el que utiliza el Homo, que es un vocabulario sacado del contexto de la situación y que genera esta estupefacción. Para el programa sí que está muy bien que la gente conozca las frases, pero a nivel del Homo como menos conocido sea, mejor.

¿Siempre te has querido dedicar al humor?
Yo soy periodista y estuve 12 años ejerciendo de periodista deportivo. Desde pequeño, siempre me ha gustado hacer bromas, hacer llamadas telefónicas, y cuando llegué a los medios vi las posibilidad de hacer otras cosas, y siempre he tenido la inquietud de hacer humor. Recuerdo de pequeño ver y escuchar las retransmisiones de Alfons Arús, del Barça y los programas que hacía como Força Barça, que era un poco el Crackòvia de antes, yo veía aquello y sabía que me gustaría mucho dedicarme a eso, hacer un programa similar, cobrar y ser feliz, y por circunstancias de la vida estudié periodismo, entré en el mundo del periodismo, pero esa inquietud del humor seguía allí, y la tenía que sacar de alguna manera.Tuve la suerte de hacer unas pruebas para APM?, buscaban guionistas, me presenté y después de dos fases me cogieron y entré como guionista, y fue posteriormente que me propusieron hacer de Homo.

¿Cómo es un día de rodaje de Homo APM? 
Empieza con una preparación de producción previa, se decide donde se va a grabar y a partir de ahí se hace un guion con frases y situaciones de entrada, cuando yo entro a alguien, la primera frase sí que está en el guión y me lo he estudiado, pero después ya tiro de memoria, porque no puedes preparar una cosa sobre una reacción de alguien que no sabes que te va a decir. Para grabar estamos unas 4 horas y se graba mucho material, para después editar esos 3 minutos que es lo que aproximadamente dura, e intentar que sea lo mejor, porque cuando vamos a grabar ya contamos con que mucha gente me reconocerá, o cuando les expliquemos que aquello se ha grabado no querrán que se emita, y partimos de unos hándicaps que siempre nos hacen perder tiempo, y siempre vamos con la previsión de tiempo para poder hacer muchos gags que se puedan emitir.

¿Buscáis perfiles concretos?
Tengo un cierto sentido de saber quién me puede dar juego y quien no, cuando estamos en el lugar, echo un vistazo y escojo a gente a quien creo que puedo sacar jugo, y muchas veces son mis compañeros quienes seleccionan a la persona y me lo comunican a través del Walkie Talkie, es una combinación de mi intuición y la de la productora que es la que dirige. A veces me confundo, pero acierto bastante, normalmente ya te imaginas quien dará juego y quien no, si ves a alguien muy serio se que no vale la pena que vaya, y en cambio alguna vez lo he pensado, y me he sorprendido con resultado.

¿A veces no te pasa que no te puedes aguantar las ganas de reír?
Sí, pero para aguantarme lo que hago es concentrarme y también es el estímulo que recibes del gag, si la situación es muy buena y en aquel momento te pones a reír, aquello ya no servirá, y pierde toda la efectividad, y por lo tanto sé que me tengo que aguantar porque dará mucho juego. Y a pesar de todo, muchas veces no puedo y me pongo a reír y se tiene que cortar, pero son pocas las veces que pasa, pero pasa.

Hacer bromas a la gente de la calle, sin saber como reaccionarán también tiene inconvenientes, ¿alguna situación donde lo hayáis pasado mal?
Problema no, pero cuando acabamos de hacer la broma, tienes que explicar que es una broma y que los hemos grabado, ya que nos tienen que firmar los derechos de imagen para poder emitirlo, y si no firman no los puedes sacar. Sí que alguna vez alguien se ha podido enfadar un poco y contesta de forma mal educada, pero aguanto el tipo, ni tampoco te puedes pasar mucho porque después tiene que firmar.

¿Qué tiene que tener una buena frase para convertirse en parte de los gags del Homo APM?
Tiene que ser corta, graciosa y que tenga alguna intención. Las mejores frases del APM? Son las preguntas, porque obligas a la otra persona a que te responda, en cambio si dices “A robar carteras” no te dirá nada, o las que obligan a hacer algo a la otra persona.

En un futuro, ¿qué te gustaría hacer?
Me gustaría continuar actuando, haciendo una ficción diferente más estándar, estar en una serie o un proyecto de una película, teatro, ahora también estoy preparando algo de teatro…

¿Nada de periodismo?
De periodista salí bastante cansado y es una etapa bastante finalizada, quizás me gustaría volver a la radio vinculada al deporte y a la vez al entretenimiento, que sea humor e información.

¿Qué consejo darías a los jóvenes que se quieren dedicar al periodismo y a los que quieren dedicarse a ser actores/ humor?
A los que se quieren dedicar al periodismo, que todavía están a tiempo de cambiar de decisión y estudiar una cosa mejor. Y los que se quieren dedicar al humor que se dediquen, que también es un trabajo, que es difícil pero que es muy creativo, muy bonito, podrás decir lo que en periodismo muchas veces no podrías.