Joana Santamans
¿De qué estás hasta los cojines?
Estoy hasta los cojines de que la historia se repita. Me da mucha pena ver como los refugiados están pasando por lo que están pasando, y más ahora que hay tantas facilidades en comunicación y podríamos ayudar pero la historia se repite. Y es que miras atrás y ves que no hace mucho esto había pasado aquí, en Cataluña.
¿En qué te has inspirado para hacer tu diseño?
En la naturaleza, como siempre hago, es mi principal fuente de inspiración.
¿Qué has querido comunicar con tu diseño?
El colibrí para mi es felicidad, movimiento, la alegría de vivir, y es lo que he querido expresar.
¿Por qué la naturaleza es tu principal fuente de inspiración?
Creo que todo ya está hecho, simplemente en la naturaleza está perfecto, eres como un fotógrafo, a través de tu encuadre y tu filtro puedes expresar tu forma de ver el mundo, y es una inspiración infinita y cada uno la puede ver de muchas formas.
¿Hay alguna cosa que se te haya resistido a dibujar?
Muchas pero igual es porque no me apetece no que no pueda hacerlo, creo que con esfuerzo se puede dibujar lo que uno quiera.
¿Te acuerdas cuál fue tu primera ilustración?
Ni idea, siempre he pintado, es el único juego que no he dejado de jugar, supongo que un autorretrato. Lo que me gustaba mucho era inventarme animales, hacer el cadáver exquisito, uno pinta lo de arriba, otro el cuerpo, otro las piernas, y salía un animal.
¿Tienes algún lugar donde te guste dibujar?
Pinto en el estudio porque es donde me siento más cómoda, aunque también es verdad que todos los fines de semana intento salir de Barcelona, buscar un entorno natural, donde hay silencio y mucho más aire y menos contaminación, allí me llevo muchas veces trabajo, cosas pequeñas. Para mi lo más importante es buscar el tono.
¿Crees que en los últimos años ha habido un incremento de ilustradores o se les ha dado más visibilidad?
Sí, y estoy muy contenta de que sea así, así como el diseño gráfico antes estaba totalmente relacionado con la fotografía ahora va directamente relacionado con la ilustración.
¿Lo más positivo que te ha pasado este año?
Darme cuenta que el esfuerzo da sus frutos, y he tenido proyectos muy bonitos y excitantes, y eso me anima.
¿Qué nuevos proyectos tienes?
Ahora tengo entre manos un par de murales, uno es en un restaurante de Paseo de Gracia con Mallorca, y otro en un estudio de interiorismo. También tengo muchas ganas de continuar con el 120×120, unos cuadros que he pintado al óleo y se han vendido muy bien. Además, también tengo un libro que saldrá después de verano y es una especie de enciclopedia de animales desde un punto de vista plástico y poético.
¿Qué haces para no estar hasta los cojines?
Hago meditación, intento hacer un poco cada mañana y luego durante el día intento recordar el espacio de meditación que he creado por la mañana para llevarlo a toda la acción que voy realizando para no estresarme y disfrutar del aquí y el ahora.
¿Qué significa hogar para ti?
Pues un santuario, un mundo de paz, que esté bien aireado, que huela bien, que sea luminoso, que sea un refugio y una fuente de inspiración.
¿A quién regalarías tu cojín?
A mucha gente, tanto a niños como adultos.
Fotografías: Mauricio Salinas