Jardín vertical

Vivir en la ciudad tiene sus ventajas y sus desventajas. Tenemos fácil acceso a los servicios públicos como el transporte. Una gran variedad de comercios, escuelas, acceso a la medicina, ofertas culturales y una abundante vida social. ¿Las desventajas? Gran contaminación de todo tipo y algunos peligros causados por la violencia y el vandalismo. Además, en la mayoría de casos, no disponemos de todo el espacio que desearíamos en nuestras casas.

Vivir en un piso pequeño o una casa sin zona ajardinada, no quiere decir que no podamos plantar una pequeña zona verde con nuestras plantas y flores favoritas. Es por ello que hoy te queremos mostrar lo fácil que es construir un jardín vertical.

El material necesario será: macetas de barro o plástico, soporte para macetas, tornillos y tacos para fijar el soporte, atornillador y un lápiz para marcar. Plantas, tierra para trasplantar y herramientas de jardín.

Además, si compras macetas de barro (sin pintar) podrás decorarlas tu mismo con pintura en aerosol. Y no te olvides de colocar una cinta de pintor para que no se te mezclen los colores.

Sobre una pared que tengas libre o sobre un soporte (como un palet) que tengas sin utilizar, tendrás que atornillar los soportes para macetas (con la separación suficiente para que luego puedas colocar las plantas). Una vez los tengas colocados, ya podrás trasplantar tus flores favoritas en las macetas que previamente has decorado y las colocarás en su lugar.

¡Ahora toca regar tu nuevo jardín vertical y ya estará listo!

¿Has visto qué fácil?

Fotos de: Guía de Manualidades