Hotel Neri
Originalmente, el edificio estaba construido sobre dos solares. En uno había edificado un magnífico palacio medieval y en el otro un edificio parcialmente destruido durante la Guerra Civil que se reformó en 1958 por Adolf Florensa dejando una fachada a la plaza con aperturas recercadas de piedra natural y un muro de piedra del siglo XII con dos arcos en la planta baja. Hoy perfectamente localizables ya que separan la zona del Restaurante del Lounge. Además, bajo los dos edificios se encontraron yacimientos romanos que fueron documentados por un equipo de arqueólogos
Se recuperó el patio del palacio y su fachada, decapando las múltiples intervenciones superpuestas sobre su estuco de cal, hasta encontrar los esgrafiados originales. Se soportaron todas las fachadas y se rehicieron de nuevo todos sus forjados. Una de las condiciones que convinieron los arquitectos con relación a la distribución del hotel fue que no se accediese a las habitaciones por los habituales pasillos oscuros. La disposición de un segundo patio en el proyecto permitía cumplir esta premisa.
En este nuevo patio se utilizó un lenguaje minimalista que contrastaba y a la vez valoraba el patio del palacio de Sant Sever, que se restituyó a su estado original. En la planta baja se sitúan el vestíbulo y la recepción, en la zona de transición que va de la calle de Sant Sever al patio, el bar/restaurante, accesible tanto desde la plaza como desde el interior del hotel, y el comedor, donde está presente el muro medieval de piedra recuperado. En las plantas primera, segunda y tercera se distribuyeron las diferentes habitaciones y en la terraza de cubierta se proyectó una zona de solárium para los clientes.
Para los arquitectos se trata de una obra especial, debido a su ubicación y a su alto contenido histórico, que consiguió entusiasmar a todos los que participaron en el proyecto.
Estas características tan especiales, pedían unas pautas de intervención a la altura del proyecto.
El hotel Neri por su ubicación y por el impresionante edificio renacentista que lo alberga, comparte valores con el barrio Gótico de Barcelona y brinda el privilegio de captar el paso del tiempo a través del Arte y de la historia, disfrutando también de la modernidad y tecnología del siglo XXI
Elegancia contemporánea en un espacio histórico en el que se detiene el tiempo. Una lujo para los sentidos. Un flujo de colores cálidos, texturas agradables, músicas relajantes, aromas envolventes y sabores inconfundibles.
Sofisticación y glamour, moda e intemporalidad, placer y deseo.
Una esencia puramente sensual.
¿Qué espacios destacarías del hotel?
Todos los espacios de el hotel Neri son dignos de destacar gracias a que el edificio es impresionante, desde el acceso al hotel, a través del portal en la fachada principal del edificio renacentista, que nos abre paso al patio original del edificio y nos conduce enfrente de la escalera de piedra y al patio del palacio, con los esgrafiados originales perfectamente conservados y restaurados . A través de este primer patio, se accede al segundo edificio, del siglo XXVIII, con fachada de piedra sobre la plaza de Sant Felip Neri, este segundo edificio escondía una de las maravillas de Neri, el doble arco del siglo XII, que alberga el espacio del restaurante Neri. Artesonados originales de madera, de la biblioteca y habitaciones, así como balcones y todo tipo de cerramientos de diferentes épocas. Y por supuesto, también hacer referencia al proyecto actual, que sirvió para unir los dos edificios y hacer posible el uso del edificio como hotel, y destacar la creación de un segundo patio que aporta modernidad al proyecto así como luz natural y vías de acceso a las 22 habitaciones del hotel distribuidas en tres plantas, obra de los dos prestigiosos Arquitectos Catalanes Francisco y Damián Rivas.
¿Qué novedades tenéis previstas para el 2014?
El hotel Neri, desde su apertura, siempre está sometido a obras de mantenimiento muy exhaustivas y de constante mejora de las diferentes zonas del hotel, tanto de las necesarias para dar cada día un mejor servicio a nuestros clientes, en las zonas de servicio interno, como para hacer posible la implantación de nuevas propuestas y servicios en las zonas publicas del edificio.
Al margen de la oferta para el turista, ¿tenéis espacios enfocados también al público local?
Es un hotel en el centro de la ciudad y para la ciudad, por esta razón consideramos que Neri es igual de importante para sus clientes internacionales, nacionales y locales. «Roba Estesa» un espacio único en la ciudad condal, ubicado en la cuarta planta del hotel, es un vergel al alcance de todas las personas que quieran disfrutar de los cielos y tejados de Barcelona ya que es lugar de impresionante encanto a cualquier hora del día tanto para desayunos al aire libre como aperitivos o comidas frescas e informales. Las noches mágicas las recibimos con cocteles, combinados y cenas frias a la luz de las estrellas
¿Qué detalles destacarías del proyecto de interiorismo del Hotel Neri?
El interiorismo es obra de Cristina Gabás, que consiguió dotar a todas las estancias de la personalidad y el ambiente que requerían sin entrar en conflicto con el edificio. Es una autentica obra de arte que sirve de inspiración a muchos diseñadores de interiores y es una referencia de creatividad y buen gusto.
En la primera planta, nos encontramos con una de las grandes obras de los hermanos Campana, los diseñadores brasileños más famosos del mundo, la Boa, 90 metros de terciopelo anudado que forman un gran trenzado irregular, desde donde contemplar el enorme lienzo, con una macro pintura del trópico, la selva interior de Neri.
En esta planta las habitaciones están decoradas con murales de oro y plata, realizado por artistas renacentistas del siglo XXI, techos de gran altura, grandes ventanales y balcones desde los que sentir la magia de unas calles donde el tiempo parece no haber transcurrido.
Los murales en las otras dos plantas del hotel, son obra de “Equipos Falsos” artistas venezolanos que reproducen en sus lienzos macro aumentos de la naturaleza, flores en la segunda planta y horizontes en la tercera.
En las habitaciones, el mobiliario se ha realizado con maderas naturales, tratadas artesanalmente con diferentes patinas.
¿Qué tipo de materiales habéis utilizado?
En Neri trabajaron todo tipo de artesanos que, guiados por la interiorista Cristina Gabas, consiguieron dotar a todas las estancias de la personalidad y ambiente que requerían para hacer de Neri un maravilloso viaje en el tiempo a través de la creatividad y el arte.
Arquitecto, que diseña muebles y los construye con madera y chapa de hierro. Tejedor, que tejiendo alambre crea lámparas de luz mágica. Grabador, que tras imprimir realiza mesas con sus planchas. Pintores de muros, que por su arte podrían ser reencarnaciones del renacimiento. Artistas del trópico, capaces de introducirnos en la naturaleza a través de sus lienzos.
¿Exceso o minimalismo?
En palabras de Cristina, se trataba de jugar con el exceso al límite, “jugar al límite sin caer en lo vulgar”. Neri es un hotel moderno, se podría decir que es minimalista con discretos guiños, casi de humor, al Maximalismo.
¿Prima la funcionalidad o el estilo?
Ninguna de las dos… ambas van de la mano, ya que es fundamental que no prime, ni el estilo sobre la funcionalidad o viceversa.
Como interiorista, ¿qué otros proyectos destacarías en tu carrera?
Mi mejor proyecto es el de asesorar a la cadena Anima Hotels.
¿Qué diferencias hay entre crear el interiorismo de un hotel y el de una casa?
La utilidad de cada uno de los espacios, un hotel es un negocio con una afluencia masiva de personas, clientes internos, que deben de tener toda la funcionalidad necesaria para poder desarrollar eficazmente su trabajo y otros, los clientes externos, personas que habitan y disfrutan de las instalaciones de los establecimientos.
¿Cuales crees que serán las tendencias de la temporada?
Yo pienso, que las tendencias cada vez son más racionales y lógicas, partiendo sobre todo de conceptos de eficacia y racionalidad, tanto del consumo energético como de los residuos, teniendo siempre muy en cuenta el respeto al medioambiente. Creo firmemente, que el futuro está en un binomio entre creatividad y lógica, sin olvidar la elegancia, que es capaz de obviar lo estéticamente fácil para realizar una lógica búsqueda del equilibrio necesario para el buen funcionamiento universal.